El templo sepulvedano está declarado Bien de Interés Cultural desde el año 1931
La mesa del altar de la iglesia de la Virgen de la Peña será restaurada, después que ya haya sido autorizado por la Comisión Territorial de Patrimonio. El templo sepulvedano está declarado Bien de Interés Cultural desde 1931.
La mesa del altar en la que se va a intervenir se encuentra en la cabecera de la iglesia, delante de un retablo barroco del siglo XVIII dedicado a la Virgen de la Peña. La actuación proyectada persigue devolver la estabilidad a este elemento, consolidando el soporte y fundamentalmente la capa de policromía que presenta numerosas lagunas y faltas de asentamiento.
La restauración se considera necesaria, ya que la mesa del altar es el elemento central que se encuentra en primera línea visual al contemplar el retablo y su estado de conservación actual es de notable deterioro.
A la iglesia inicial de la Virgen de la Peña, una construcción románica del siglo XII, se suman los volúmenes del camarín, la sacristía, el pórtico (que se le añadió en el XIII pero también es románico), la galería porticada en el lado de la derecha y la casa del cura a los pies.
Este templo tiene una singularidad más, y es que está situado sobre una de las Hoces del Río Duratón, en un paisaje de singular belleza. En la parte trasera de la iglesia se sitúa un mirador desde donde se puede disfrutar de la vista de las primeras Hoces del Río Duratón.